Es como nrrar una historia, pero con tu personaje, ejemplo de el foro de Alexa:
Re: Hijos de la Magia (POSICIONES ABIERTAS)
.*Observé a la manada, iba a comenzar la cacería... Había novatos en el tema... Contemplé como los expertos se deshacían en complicadas explicaciones, eso era lo único que me desalentaba de la idea de comenzar a cazar, cuando el momento llegara, claro, las torpes explicaciones de los mayores... Después de todo, no era muy difícil, el lugar estaba lleno de alces, y solo había unas pocas consignas a respetar:
*Ataca por atrás para actuar por sorpresa
*No te acerques a las astas de los machos, o terminarás mal
*Ve directamente a la yugular
*Si eres novato, ataca a los débiles
*Guíate por todos tus sentidos
...Después de todo, éramos lobos... No? Teníamos el instinto de caza, no era necesario tanto aburrido palabrerío...
Decidí que, después de todo, quería experimentar el hecho de matar tu propio alimento, quería sentir la tensión del momento, quería ver el terror de los alces grabado en sus ojos... Sí, había llegado el momento...
-Mamá...- susurré cuando me acerqué lo suficiente hasta ella- Emmm... Creo que quiero cazar... Puedo unirme?... al menos para probar...- La miré a los ojos, mientras usaba ese tono persuasivo que sabía ella no podría rechazar....
Y otro continúa la historia, pero con su personaje, habrá normas y reglas, para mejor.
No se si me explico...
.
Y en el mensaje siguiente escribe otro, el que le toque:
Re: Hijos de la Magia (POSICIONES ABIERTAS)
.* Miré anhelosamente al cielo. Ví como la loba alfa guiaba a la manada hacia el árbol, todo a mi alrededor eran caras desconocidas, algunas hasta hostiles. Decidí seguir mi camino hasta llegar a los expertos en cacería. Cuando vivía sola cazaba pequeñas liebres, o coyotes. Nunca he presenciado una cacería en manada como ésta.
Pude apreciar cómo hasta algún cachorro parecía animarse para la cacería, seguramente con mayor apoyo que yo...
Encontré a un grupo de cazadores jóvenes atendiendo una explicación y decidí unirme, intentaba captar y asimilar todo lo que podían mis atentas y dedicadas orejas, aquella iba a ser una prueba difícil, debía demostrar a la manada lo que podría hacer y que me aceptasen de forma afectiva y definitiva...