Recuerdo del primer mensaje :

Actualmente es: AMANECE


Bienvenidos a la zona de role play!
En este thread irá todo el role DE FANTASÍA.
He aquí el formulario de la ficha, que tendrás que llenar y enviarme por MP antes de poder participar en el role:

Nombre de usuario:
Nombre del personaje:
Características:
*Historia:

*=opcional. Si escribes algo, no te explayes mucho o los demás no tomarán el hilo y se brincarán esa parte. No hay humanos en la historia, así que favor de no incluirlos

La historia se irá haciendo, y se irá actualizando aquí abajo para que los que se vayan integrando vayan agarrando el hilo.
El role se irá creando, pero comenzará siendo todos unos desconocidos con todos. Los mensajes del role van aquí.

Refunfuñé, pero al final terminé por reír también.

- Sabes... -me levanté- sé que no tiene mucho que ver, me acordé con eso de "tiempos y cosas mejores"... realmente, ayer, quería que Quirina hubiera sido la verdadera...

Quirina... Yo también lo deseaba... Pero Quirina falleció... Ya no está en este mundo...

-Lo sé... Calisto... Yo también lo hubiera deseado- Susurré.

-Ya...-susurré para tranquilizar a Cali-a mí me sucedió algo parecido con mis padres, hace un par de meses...pero descubrí que eran mis hermanos. Los odié más que nunca a partir de ese momento-no pude evitar que una lágrima resbalara por mis escamas. Dos. Tres. Comenzé a sollozar sin poder evitarlo, y no quería que me vieran así.

Ladeé un poco la cabeza e intenté pensar en otra cosa.

La ví, no las iba aocultar. La abracé con el cuello como pude y también se me escaparon algunas lágrimas.

- Tampoco hace bien guardarlo... -susurré- tranquila Nady, el pasado es pisado, se que duele, porque estoy igul que tú, en fin, ahora nos tenemos los unos alos otros, somos como una familia, una manada... por cierto Maya... ¿de dónde conocías a mi hermana? jamás habló de tí y tampoco te ví antes...

-Una manada-susurré.-sería buena idea...pero por ahora...¡AY!-grité. Había intentado tumbarme, pero la cicatriz me dolió horrores. Cerré los ojos para intentar controlar el dolor sin tener que lanzar otro grito.

-Tendré que dormir acostada-bromeé, aún con los ojos cerrados y el ceño fruncido

Hice una mueca.

- Si, mejor descansa, nos vendría bien a todos -dije mirando también a Maya.

Me puse un poco nerviosa... Por lo que dije una mentira.
-La conozco porque... Me acuerdo que... Mi madre me habló de ella...- Dije temblorosa.

Me recosté al lado de Nadya. Una manada eh... No sonaba mal... Habíamos estado mucho tiempo junt@s...

- Yo se que puede parecer, pero... -suspiré- no mientas Maya, eres demasiado sincera, no te sale mentir -dije con un poco de pesar- ¿de dónde la concoías? dime, por favor...

Tenía razón, soy pésima mintiendo siendo Maya.
-Está bien... Tienes razón... Les dire la pura verdad... O parte de ella- Dije sonriendo. -Son pequeños fragmentos de mis recuerdos... Yo era... Muy pequeña... Apenas tenía unos pocos meses de vida, pero lo recuerdo como si fuera ayer... Quirina era una de mis mejores amigas... Siempre me defendió, me brindó protección...- Me limité a decirles eso, no podía decir más.

¿cómo era posible que yo no lo supiera? después de todo, Quirina era mi hermana, siempre estábamos juntos... había algo que no me convencía.

- ¿Qué más? no es posible que no nos conociéramos antes... -pregunté exigente-.

Me puse algo tensa, nerviosa.
-No puedo decirte más...- Susurré.

- Vamos Maya, tiene que haver algo... -rogué- no es posible, no lo entiendo, Maya...

Los dejé que platicaran, intentado encontrar una posición cómoda para dormir.

-No puedo decirte más... No es que no sepa... Pero no lo recuerdo... Es por eso- Susurré nuevamente.

Miré hacia el horizonte. Estaba atardesiendo. Esa hermosa gama de colores tranquilizaba mi espíritu.

Me levanté.

- Está bien, los iento -respondí un tanto con pesar y me alejé hacia la orilla del lago.

Realmente quería saber, tal vez así descibriera algo que me ayudara a saber lo que en verdad había ocurrido esa noche.

-Ya...duérmanse...-me quejé.-Mañana, Cali, si quieres, nos podrás acompañar a buscar plumas...quizá encontremos el recuerdo que le falta a Maya-sugerí, y cerré los ojos, aún en forma de dragona.

Ví a Calisto algo preocupado, con ganas de saber sobre mi pasado... No podía decirle... Sabía lo que me pasaba pero... No podía... Decirle.

Cayó bajo nosotr@s el manto nocturno. Comenzó a llover. Hize que crecieran unos árboles rápidamente, formando una cueva con sus raices.
-¡Calisto! ¡Ven! ¡Te mojarás y pescarás un resfriado si te quedas debajo de la lluvia!.

Luego de gritar, cerré mis ojos, y comenzé a soñar..

Me quedé bajo esa fina capa de agua, adoraba la lluvia, Quirina también y solía decirme que a mi madre le fascinaba corretar cuando llovía.

Esperaría la mañana, no tenía sueño-

Los rayos del sol se asomaron lentamente, como si la lluvia le hubiera llegado al astro rey. Bostecé un poco.
-Mai, busquemos tu pluma para que recuerdes lo que...-me interrumpió un bostezo-...pasó esa vez...-

Me aceruqé despacio a mis amigas luego de beber algo de agua.

Los primeros rayos del Sol, me despertaron, además los bostezos de Nadya y sus palabras entrecortadas.
No quería recordarlo... Tenía miedo de hacerlo. Si lo hacía... Si lo hacía... No quería. Simplemente no quería.

-No quiero... Lo siento... -Susurré.

- Bien, no lo hagas... -dije mientras me acercaba y seguía de largo. Por culpa de aquello, ese encuentro, no podía pensar en otra cosa que no fuera mi hermana, lo que me moletaba demasiado.

Me preocupaba Calisto. Se veía molesto y a su vez preocupado por su hermana. Mi preocupación me venció, por lo que me levanté medio tambaleándome y me dirigí hacia él.

-Calisto... No te preocupes por tu hermana... Ella... Ella está bien... Ahora descansa en paz... Si tienes alguna duda, o necesitas algo, no dudes en preguntarme o consultarme...- Le abracé con el cuello. -¿Extrañas a tu hermana... Verdad...? Yo también la extraño... A veces no se necesita guardar las lágrimas... Si las penas no se lloran... Se convierten en condena...- Dije serenamente.

Pues así era, lo sabía. pero realmente dolía no tener a mi única hermana, única familia que mostró ek verdadero amor, cariño, que la felicidad existía... ella era mi todo, y mi mundo de vino abajo cuando su vida se desvaneció. Dejé caer algunas lágrimas sin decir nada, devolviéndole el abrazo. Sin embargo, me seguí alejando lentamente, necesitaba calmarme.

- Gracias... -susurré

-De nada- Susurré igual.
¿Qué era esto? Comenzó a llover, pero el Sol aún estaba allí... No le di demasiada importancia, pero seguí a Calisto. Me transformé en Afrodita y me metí en el río, siguéndole.