Actualmente es: AMANECE


Bienvenidos a la zona de role play!
En este thread irá todo el role DE FANTASÍA.
He aquí el formulario de la ficha, que tendrás que llenar y enviarme por MP antes de poder participar en el role:

Nombre de usuario:
Nombre del personaje:
Características:
*Historia:

*=opcional. Si escribes algo, no te explayes mucho o los demás no tomarán el hilo y se brincarán esa parte. No hay humanos en la historia, así que favor de no incluirlos

La historia se irá haciendo, y se irá actualizando aquí abajo para que los que se vayan integrando vayan agarrando el hilo.
El role se irá creando, pero comenzará siendo todos unos desconocidos con todos. Los mensajes del role van aquí.

Alzé vuelo con mis enormes alas vampíricas y, junto a Nadya, llegamos rápidamente al lago. Caí en picada pero me cubrí con mis alas para que el impacto no sea tan duro. Me saqué mi ropa luego de entrar en el agua y comenzé a lavarla, sacándole el olor y sangre.

-El agua es bastante rica...- Dije bebiendo un poco. -Aparte tiene hierbas especiales que descomponen un poco el agua, pero es apta para beber... Ya que sabes que los vampiros somos débiles ante el agua, ya que tiene un alto poder de purificación. -Expliqué.

Comenzé a nadar hacia el fondo, buscando algo que sentía atracción.

(He vuelto!!! hola a todos!)




--¡Maldita sea, esto me va a chafar el paseíto!



Volaba con el ala dercha desgarrada y echando humo abundante. Lograba mantenerme a flote apenas con la otra mientras combatía a en el aire arrojando llamas y maniobrando de manera imposible para quitarme de encima al demonio volador que me acosaba. Cargé contra él y le atravesé con mi cuerno en llamas pero, a cambio, él me tajó el otro ala y ya no me pude mantener más en el aire.



Caí abatido, con ambas alas heridas y humeantes sobre las aguas de un lago.

Estaba dando un paseo, cuando vi algunos caballos y yeguas, por lo que me alejé un poco

--Au..Auuu...Piñazo terrible...Ay...-- Emergí de las aguas, empapado y agotado y me dejé caer sobre la orilla. Entonces vi a alguien cerca.



--Ho..hola...¿nos conocíamos?-- Pregunté, moviendo la cabeza.

Moví la cabeza de un lado al otro y me alejé galopando y después volando

--¿Pero qué...? Argh...¿¡Por qué huyes!? Puf...debo tener un aspecto lamentable.



Apagué el fuego de mi cuerno y lo cambié por luz y, con ésta, me traté las heridas que tenía en las las y las magulladuras del resto del cuerpo. Luego miré al cielo.

Me escondí tras un árbol y mire a todos lo caballos

--Au...au...Au...Menudo golpe...¿Y ese de ahí de qué va?



Alcé mis alas y, con un destello de luz, aparecí tras el nuevo, que estaba agazapado en unos árboles.



--Hooolaaaaa.

Salí y bajé la cabeza
-.....Ho...
Hacía mucho que no hablaba con nadie

--¿Ho? ¿Así te llamas? Tranquilo, no temas nada de mí...Salvo que seas un demonio. Mi nombre es Aionhai ´´El Castigador´´ , cazademonios y justiciero. Encantado.

Le ofrecí la pata derecha, que brilló con luz al levantarla y puse mi cara más amable.

Puse la cara mas seria
-No, me llamo Bella, como me voy a llamar Ho
Me rei
-Estas loco, pero un gusto, ''castigador''

--No me llames así, por favor, solo Aionhai. Bella. Es un nombre precioso. Mis respetos, lady Bella. --Me incliné con una reverencia majestuosa. --Quizá querríais venir conmigo. Hay una manada muy...variopinta...cerca pero, contadme vuestra historia, si sois tan amable, milady.

-Aghh...Odio que me hablen asi...Pero el tipo no es tan malo
Dije en mi mente
-Gracias..La verdad..Es que nací por aqui cerca, blablabla, crecí y decidí ''abandonar el nido'' como dicen, nada interesante...Y ahora...Puedo escuchar la tuya, Aionhai?

Pude leer la mente de Aionhai cerca, por lo que dejé que Maya hiciera lo que quisiera. Torné mi apariencia a la de una equina beige, mi forma natural y llegué volando, casi con ansias, a donde estaba mi amigo ya casi desaparecido.
-¡Ahionhai!-exclamé al verle platicar con Bella, pero inmediatamente enmudecí. Su retorno sólo nos haría lamentarnos la muerte de Zashee y Maya, pero confiaba en que había una mejor opción.

Vi a una yegua, era una completa desconocida, por lo que la miré con mucha curiosidad
-Quien es...?
Pregunté a Aionhai

Le sonreí a la yegua que preguntaba mi nombre.
-Bella, soy Nadya. Sé tu nombre gracias a...unas circunstancias dadas-reí un poco.-Soy psíquica y leo tu mente. Un gusto conocerte-afirmé, con una de mis mejores sonrisas dirigidas a la pobre y confundida yegua.

-Un gusto..Nadya
Dije algo tímida, todo pasaba muy rápido

-No te preocupes, al principio puedo confundirte pero después ya verás-afirmé guiñándole un ojo.-Si gustas puedes quedarte aquí, en realidad no hay ningún inconveniente-invité, mirando de reojo a Aionhai.

Ví que Nadya se alejó por lo que salí del agua, haciendo que unas alas de murciélago crecieran en mi espalda, en mis omóplatos y alzé vuelo. Ví a Aionhai y a una yegua nueva. Me acerqué velozmente y puse unas algas curativas que había encontrado en el lago, hice una reverencia elegante con mi cuerpo y alas y saludé a la nueva yegua.

-Mucho gusto, soy Rosario en este cuerpo, ¿como te llamas?

--Me alegro mucho de veros. Estáis todos bien, gracias a los Cielos. Tan hermosas como os recordaba. -- Levanté mis alas y éstas relucieron con luz propia.-- No hay mucho que contar de mis historia, pues no recuerdo ni la mitad, Bella, fui consagrado a la causa de la justicia y al exterminio de demonios...que merezcan ser exterminados. --Miré a Nadya de reojó y pensé, para que me oyera ´´No a los que tengan buen corazón´´



De mi cuello pendía un amuleto con forma de estrella que brillaba con luz azul. Sonreí y pensé. ´´Lo he conseguido. Tengo la Gema de Alma´´

Acerqué mi mirada a aquella piedra preciosa, que al parecer irradiaba luz propia.
-¿Y bien...?-alcé una ceja, mirando a Aionhai.-¿Para qué funciona? Me bloquea-me quejé.

--¿Recordáis el sacrificio? He estado buscándola un mes y me he enfrentado a incontables demonios siervos de Jormengander por esto. Esta gema evita el derramamiento de sangre. Ya os explicaré más. ¿Me he perdido algo en mi ausencia?

Negué con la cabeza, incapaz de hablar. Al parecer, mi más grande deseo se había realizado: se salvaría la vida de mi querida hermana y de Zashee. Intenté ocultar mi alegría como pude, pero al final salió en forma de un relincho casi triunfal. Abracé a Aionhai con el cuello como muestra de gratitud.
-Gracias...-susurré en voz baja.

-¿No derrama sangre?- Pregunté intrigada.
Me tiré en el suelo, agotada por haberme forzado a entrar en aquel lago.